Ya casi no recuerdo ni el primer día. El 11 de Marzo escribía mi primer post desde el encierro y la nube con inmensas esperanzas. Hoy han pasado 141 días y aquí sigo. Hemos aprendido bastante, cómo es un trabajo full time online, cómo vivir como nunca antes codo con codo con nuestras familias: y estamos a salvo, por el momento, ¡afortunadamente! si bien esta línea de seguridad es frágil. Explico a mis amigos que la irrealidad se ha apoderado de muchas de nuestras relaciones sociales. Hablamos constantemente del COVID como si un fantasma fuera a asaltar nuestras casas. No me siento engañado por nadie, ni por los políticos o los mass media, puesto que básicamente pocos o ninguno tienen una visión clara de los próximos tiempos. Únicamente juegan sus cartas, y creo que no son para nada buenas, acaso un tanto emborronadas
Solo sé que estamos en manos de los científicos. En los laboratorios la vacuna, bien sea europea, norteamericana y china, avanza. Hoy el Ministros de Sanidad ha dicho que una vacuna segura estará en el primer semestre del 2021… pues vale, ahora estamos en plena canícula, ola de calor, pensando fundamentalmente en las vacaciones, en desconectar y recoger fuerzas. No importa lo que hagamos en este mes que viene. Eso sí, hay que descansar.
Somos buceadores de simas abisales, somos astronautas que viajan a parajes remotos. Somos halcones. Pero hasta la leona más valiente deberá darse un respiro si quiere guardar la manada.