- Ante el vicio de pedir se demuestra la capacidad de apostar.
- Dime por qué presumes y te diré qué es lo que mereces.
- La muerte abastece lo que la vida favorece.
- Sancho, los piojos que entretienes hacen de tus huesos su saco.
- La vida es breve porque la verdad tiene esquinas.
- Es lo que no tenemos lo que nos invita.
- Tuvimos la razón mas ahora no recuerdo dónde ni cuándo.
- Es de sabios sentarse. Los tontos se apresuran sin otra.
- Te miro al fondo de los ojos… ¿te dije cuánto os quiero?
- Granada en mano, los tiempos se equivocan.
- A dinero guardado, billetero con veneno.
- No soy Dios… pero ¡ah!, cuánto sufro si me equivoco.
- A veces la avaricia rompe el saco: Por eso siempre quedan los amigos.
Qué disfruten de ellos…